Hoy te abrazan. Mañana te empujan.

Hay tantas personas que te dirán que te quieren y no estarán en los malos momentos.  Cuando todo valla mal y tu futuro lo veas en negro estarás sola y perdida en un desierto de dudas y desigualdad. Cuando necesites un abrazo, un beso y un 'estoy a tu lado' nadie, absolutamente nadie, será capaz de oir tu llanto. Yo creo que no he hecho nada mal. He sido buena con la gente como se lo merecía. He tratado de seguir al corazón y no a la mente en el momento oportuno. Aunque he de admitir que me he dañado a mi y a algunas personas haciendo esto. Solo pretendía ser feliz. 

Yo me callo lo que siento y lo que pienso. Muchos dirán que eso es mentira y que ya muchos palos me he llevado por expresar mis ideas y pensamientos en voz alta. Pero créeme que aún oculto más.

Me canso de que estas líneas sean mi única forma de escape, para desahogarme, para ser una voz en este mundo por un momento.

El tiempo pasa lento. Mi reloj ya se paró hace mucho tiempo.

La decepción y este sentimiento indescriptible se acumula en mi pecho.

Muchas veces me gustaría tirar todo por la borda.

No es mas grande quien más ocupa, sino quien más vacío deja cuando se va.

mi autoestima roza el suelo.

Pienso en todo un poco, lo que me preocupa, me hace sonreír, llorar... Llego a la conclusión de que me gusta tener a alguien detrás de mí, que me recuerde que sonría, que mi sonrisa es preciosa. Lo necesito, siempre lo he necesitado, supongo. ¿Por qué? Por que no soy capaz de hacerlo yo misma. De mirarme al espejo y pensar sonríe, eres preciosa y vales mucho. -¿Donde está esa autoestima?-No. No soy capaz, ni lo seré. Necesito que alguien confíe en mí, que me quiera, que crea en mí. Por que yo no soy capaz de hacerlo por mi cuenta.  Alguien que consiga llenar con sus palabras las carencias de las mías. ¿Si consigo creer en mí misma, necesitaré a alguien que me lo recuerde? ¿Es esa la pregunta que busco? podría responderla, pero no sé. Por algo se empieza, supongo. Mañana será otro día. Si quiero que me sonrían, tengo que ser la primera en hacerlo. Sí.

Pero es sólo una hipótesis...

Nunca se me dieron bien los cálculos rápidos pero en esta ecuación lo que importa no es la velocidad. Mi problema es que tampoco controlo ni el espacio ni el tiempo en dicha ecuación. No estamos hechos de átomos sino de historias. Eres esa sustancia desconocida que hace que este cálculo este elevado a pensamientos que nadie consigue descifrar. Y si lo nuestro es química espero que la reacción entre tú y yo nunca sea reversible y que en su mayoría se encuentre en equilibrio. Nos atraemos y repelamos en la misma medida pero cada 2 por 3 se nos aceleran las pulsaciones por minuto. Derivamos en unas ganas máximas el uno del otro, lástima que haya demasiadas variables en esta ciencia. Hemos sumado muy pocos momentos y eso multiplica mis “te echo de menos”. La incógnita de a donde vamos no la resuelve el viento, y he perdido la cuenta de los besos que te debo.
 
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y allí estarás tu.

"Me gustaria ir a Paris, mientras me subo a lo alto de la Torre Eiffel y veo toda Francia. ¿Después? A Italia, donde me haré la típica foto donde yo, con toda mi fuerza y valentía, sujetaré la Torre de Pisa para que no se caiga. ¿Luego? A Londres donde intentaré hacer reir a los guardias de seguridad con mis caras más extrañas y mis chistes malos. ¿Siguiente? A Las Vegas, donde me gastaré la ostia de dinero en el casino para no ganar nada, pero podre decir: ¡Viva Las Vegas, baby! ¿Aún más? Pues me iré a Nueva York, sí, y me subire a la Estatua de la Libertad y veré como todo Manhattan amanece. ¿Y por ultimo? Yo siempre digo que lo mejor, para el final. Por último me iré a Los Angeles. Arrasaré todas las tiendas de Beverly Hills, mientras me gasto casi todos los ahorros que me quedan en ropa. Luego, en Hollywood, iré mirando una a una las estrellas del Paseo de la Fama y me haré una foto con la inmensa mayoría mientras sonrío bebiéndome mi Starbucks. También, me haré una foto junto al cartel de Hollywood señalándolo con una gran sonrisa en mi cara diciendo: Sí, estoy en L.A. Y alfinal me subiré a lo alto del mirador y miraré por última vez todo Los Angeles. Pero cuando vuelva aquí a España, me esperará lo mejor. Me esperarás tu."